El tema político alrededor de la comunidad LGTB ha ido tomando fuerza en especial, el último año ha dado mucho que hablar, que el alcalde patrocina aunque no preside el desfile del orgullo, que el presidente propone que se aprueben los derechos civiles de las parejas del mismo sexo, que el congreso se voltio y ahora nos reconoce… en fin maricaditas mas, maricaditas menos, las personas de todas las orientaciones y desorientaciones sexuales han ganado reconocimiento en el terreno político.
Sin embargo aunque hay cosas que el común de la sociedad ha aceptado y otras que el estado esta empezando a asumir, existen en mí parecer ciertos derechos de los que nadie ha hablado y que deberían respetarse, son aquellos los que vengo a exponer aquí para ponerlos en reconocimiento y aceptación públicos.
- Derecho a la identidad personal: Este derecho es en realidad un llamado al público en general a no pensar que todos los gays somos arquetípicos, que nos gusta vestirnos de mujer y morbosear a cuanto hombre nos pasa por el frente, tenemos derecho a que se nos reconozca como personas con gustos y disgustos individuales, y de ser tan varones como la maricada nos lo permita.
- Derecho a la identidad de pareja: No se si a alguno de ustedes la ha pasado pero una vez que le presente mi pareja a un amigo heterosexual, él, un poco desconcertado por cierto, pregunto tajantemente: -“¿Y cual de ustedes dos es la mujer?”- a lo cual debimos responderle que ninguno de los dos, que el principio de una relación homosexual se basa en que las dos personas son del mismo sexo. Es decir tenemos derecho a tener pareja sin que alguien venga a heterosexualizar la relación.
- Derecho a la intimidad: El hecho que una persona sepa que uno es gay no le da permiso para preguntar abierta y libremente sobre nuestra vida íntima hasta que no se le de un permiso explicito para ello, a ninguna de mis amigas hetero les he preguntado como son ellas o sus maridos en la cama y que o como lo hicieron el día anterior.
- Derecho a la no rotulación: bueno todo el mundo piensa que si uno no es heterosexual entonces es gay y ya, pues bien todos sabemos que hay mas variedades de gris entre hetero y homo que entre blanco y negro, que a este le gustan los hombres y las mujeres, que a este solo cuando esta borracho, que a este no le gusta que ni lo miren, que a este le gustan los golpes, que el otro le gusta la ropa de mujer pero no es gay, en fin, debe haber un derecho para que a uno no le coloquen etiquetas para manifestar libremente sus afectos o desafectos.
- Derecho al libre ejercicio de la maricada: Este es un derecho fundamental, derecho de cogerle la mano al novio y hasta besarlo en la calle (sin pasarse a mayores creería yo), a salir con el a bailar en las fiestas de la familia al son de los 50 de Joselito, de coquetearle al amigo gay de la prima de forma frentera, de ponerse la peluca rosada con el bolso plateado para ir a una entrevista de trabajo, de ir a tomar el té con las amigas en la terraza, etc…
- Derecho al reconocimiento: Tenemos derecho a andar por la calle y ser reconocidos como gays, en especial por los que reparten papelitos de burdeles para heteros necesitados, desordenados o simplemente intrigados, y a que no nos estén tratando de hacer entrar a esos sitios de voyeurismo con la habitual frase: “chicas, chicas, chicas…”
- Derecho a sentir gusto: Este derecho va tanto para los tipos ‘buenos’ como para los novios celosos, “Mirar no es comprar”, dicen por ahí, así que tenemos derecho a ver a aquellos seres que por sus dotes naturales o cuidadosamente trabajadas resaltan entre la multitud sin que existan miradas de reproche. Este derecho se ejerce con mas razón si el observado en cuestión dispone de pocas prendas que cubran su destacable humanidad.
- Derecho a la belleza: Una gran mayoría de personas gays tenemos tendencia a cuidarnos, a vestirnos de forma armoniosa, salir a la calle bien presentados y aseados, que le haremos si somos bellos, por lo tanto tenemos derecho a resaltar en un grupo por nuestra maravillosa presencia y ser reconocidos por ello.
- Derecho a la critica: Como complemento al derecho anterior, tenemos derecho además a hablar y criticar a las personas que nos rodean y sugerirles que deben usar para que no queden mal y para que no lo hagan quedar mal a uno.
- Derecho al sectarismo: Si bien existen una serie de señales que los homosexuales empleamos para reconocernos los unos a los otros y que además se han ido popularizando en la comunidad heterosexual, aclaramos que nadie tiene derecho a mirarnos mal mientras le coqueteamos en el transporte público al tipo de la silla de enfrente y el amigablemente nos corresponde, o casos similares.
Bueno, creo que son más los derechos ausentes que los mencionados pero sospecho que este es un buen comienzo, espero entonces sus aportes, de la misma manera, permiti el acceso a los comentarios para que todos los que quieran puedan opinar aquí.
De la misma manera autorizo explícitamente a todo aquel que me lea a copiar y publicar cualquiera de los artículos presentes en este blog en sus respectivas páginas, siempre y cuando se indique la fuente es decir la dirección de mi página y así de esta manera llegar a muchas más personas.
Debo excusarme si herí sensibilidades en mi post anterior al tratar el tema del amante, como siempre recuerdo que no es mi intención asumir ninguna posición radical y sino de tolerar el derecho que cada quien tiene de ser y hacer, recalco el complemento presentado por el Joker; estas son sus sugerencias respecto al manejo del tema del amante:
- Sea extremadamente cariñoso con ambos.
- Genere un ambiente de confianza tal que el oficial no sospeche de sus "salidas con amigos del colegio"
- Ármele cortas escenas de celos al oficial, suponga que él es el que tiene amante.
- Si lo pillan, hágase la victima (por si el consejo de la negación absoluta no funciona), pobre hombre, lo han lanzado a los brazos de otro por falta de atención, de tiempo, de espacio, de lo que sea...
- Asuma las consecuencias si al "Osito" le dice "Bebe", y/o viceversa, y no puede explicarlo.
Como siempre gracias por leerme, ahora que instale un contador de visitas me siento muy complacido de saber que lo que escribo llega a mucha gente, recuerden que este blog no lo hago yo, lo hacen ustedes.
5 comentarios:
Hola Joey,
como siempre me encanta tu Blog, cabe enfatizar que la declaración de derechos aplica a toda la comunidad LGBT, no tan sólo a gays :)
Un besito y un saludo desde Barranquilla!
Don Yois...
Si y no.
Creo que el decálogo...muy propio para estos momentos en que los hetero del congreso quieren ser mas gay que el septiembre gay de los sábados dela canal VH1 y los gay del congreso pretenden ser mas hetero que los curas católicos (vaya uno a saber), creo que...
Una cosa es el respeto a la identidad, el libre desarrollo de la personalidad y la intimidad...esos son derechos, los demas creo que son variantes que "como minoría" deben ser respetados pero pueden ser agrupados, sobretodo lo que tiene que ver con ir a una entrevista de trabajo con peluca rosada y la vaina (vairante del derecho del libre desarrollo de la personalidad...creo yo).
Ante todo el dilema no es presentarse como las pobres victimas sino demostrar que dentro de nuestras vidas la "normalidad" es un factor tan natural como en la vida de cualquier ser humano y que la diferencia radica en lo que hacemos bajo las cobijas (a veces encima por cuestiones de afán, emocion o lo que sea).
Cuestion que tambien aplica a las niñas...por simple lógica.
Eso si...las veces que he besado a mi diva en la calle a plena luz del día si he sentido la extrañeza de no poder hacer lo mismo con "el susodicho" con quien debemos esperar a que la noche, el bar o el apartacho sean los "complices" de nuestras demostraciones sencillas de afecto.
Un Abrazo
Que bien escribes... De corrido!! Jajajaj, me gustó mucho lo que escribiste de verdad.
La cosa del amante al final no la caché... debo leer el post anterior parece!!
Un abrazo
Me acabo de dar cuenta que tenemos el mismo formato de blog! Chocale!
jejejeje
bueno blog, saludos desde Chile
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