La pesadilla gay

Hemos terminado de tomar el café de la mañana cuando José Cuervo (Si, tiene nombre de Tequila) recuerda que en pocos días recibiremos la prima de navidad de la oficina y que dado que la mayoría somos hombres vayamos al sitio al que nunca iría alguno de ellos solo: “La piscina”.

Básicamente para los que no viven en Bogotá, La piscina es lo que podríamos llamar un burdel caro, está ubicado en una de las zonas de tolerancia de la ciudad, lamentablemente a pocas cuadras de mi oficina, donde un estricto proceso de selección pone a veinteañeras jovencitas a bailar mientras se desnudan, a compartir tragos con los clientes y a intimar con ellos carnalmente, eso sí, si el presupuesto lo soporta.

En particular detesto la hetero – rumba, esos lugares donde los masculinos presumen de machos en caza y las mujeres presumen de renuentes hembras fuera de celo (cuando en realidad quieren todo lo contrario), donde debemos acoplarnos a unos estereotipos de comportamiento y escuchar las hormonas de los otros presumiendo de sus gustos físicos por el sexo opuesto, pero realmente lo que detesto es estar fuera de mi zona de caza y ver como otros se divierten mientras yo me resigno a ver limitado mi campo de acción.

La propuesta de José Cuervo desata un tsunami en el mar de testosterona a mi alrededor, los entusiasmos se alteran y empiezan las risas en medio de la detallada planificación de una actividad decembrina que nada tendrá que ver con aguinaldos o regalos, los que están casados deberán informar a sus esposas con alguna excusa muy reforzada y los que tenemos planes menos sórdidos los viernes debemos cancelarlos con dos semanas de antelación.

Afortunadamente no tengo que esconder mi orientación sexual en la oficina y entonces decido no contarme en el grupo está dispuesto a pagar el doble o triple de precio por una botella de licor solo por apreciar en vivo unos senos femeninos diferentes a los de sus respectivas parejas, manifiesto al emocionado grupo mi intención de no ir, pero la euforia colectiva (y la masa es torpe en su conjunto) no acepta razones, ya que para ellos es un espacio que podemos compartir.

Total, en menos de dos semanas estaré saliendo de mi oficina rumbo a La piscina, gastare un montón de dinero para apreciar un show del que hace bastante tiempo perdí el interés, sin contar además que no puedo rescatar ni siquiera el aspecto artístico de las desnudistas ya que dista mucho de la calidad de lo observado en los bares americanos.

Pero claro el hecho de haberme revolcado con la mitad de la Bogotá gay me da cierta aura de testosterona que inquieta a una mujer por puta que sea y ese aire de deferencia por las mujeres en el lugar donde están cazando clientes las inquieta aun mas, total al entrar al sitio y tomar una mesa cercana a la piscina ubicada dentro de “La Piscina”, se me acerca una voluptuosa mesera con sus flácidos senos tambaleantes y me pregunta: “Que le puedo ofrecer papito”, para mi una venda negra y un frasco de cianuro con valeriana.

Mis compañeros se ríen, se preguntan cómo las niñas del lugar justo buscan al marica de la oficina, pedimos ron, todos buscan pareja para bailar menos yo, y de nuevo una voz femenina habla detrás de mi oído: “¿Porqué tan arisco mi amor?”, bailo como para no quedar mal pero la verdad, a mi pareja le sobra algo en el pecho y le falta algo entre la piernas, ese amasise con olor a perfume dulzón me está mareando más que los tragos de ron puro que me he bebido.
Primer show de la noche y yo busco insaciable en el celular el número de cualquier persona que me pueda rescatar de allí, me pregunto a mí mismo, “¿Mi mismo que hago aquí?, ¿Lo que sea que me unte me hace más atractivo para estas mujeres o son así con todos los clientes?”, miro alrededor y confirmo que no, la mayoría son hombres que aunque muy bien vestidos poseen un promedio de edad 10 o 15 años mayores a la mía, con una obesidad propia de un sedentarismo oficinista y un pésimo gusto para combinar colores.

Mary creo que se llama se sienta a mi lado a mirar el show, me abraza y me dice “¿Me invitas un trago?”, yo asiento pero retiro el brazo que tiene alrededor de mi espalda con la excusa de alcanzar la botella, ella me asegura que no debo estar nervioso, que nadie le va a contar a mi esposa (ja!) y que trate de disfrutar del espectáculo, yo no puedo más me levanto de la mesa y me dirijo a un baño plagado de afiches con mujeres de senos operados mostrando en bikini el éxito de su portentosa operación, deseo salir corriendo me aplico agua en la cara, miro por centésima vez el reloj y empiezo a buscar una excusa para irme de allí.

Mary se acerca a la puerta doble del baño y me pregunta si estoy bien, “No, no estoy bien, me aburren estos lugares, soy gay!!!”, ella se sonríe, me dice que me espera en la mesa y que ya hablamos.

Cuando salgo del baño la veo hablando con otras de las niñas del lugar quienes me miran y se sonríen entre sí, yo deseo que la tierra me trague y me vomite en Somondoco, mientras camino la mesa buscando la ficha del vestier para recoger la chaqueta e irme de ese lugar.

El show ha terminado y el próximo será en media hora, Mary se acerca me saca a bailar a las malas, yo accedo sobre la rechifla de mis compañeros quienes antes estaban demasiado ocupados en sus asuntos para observar mi desesperación; ya en la pista algunas de las compañeras de Mary se unen al baile y de una forma que no pude preveer termino bailando con 4 mujeres al tiempo en la mitad de la pista, sobre la mirada asombrada y envidiosa de mis compañeros de oficina.

Esto es demasiado hetero para mí, me trato de bajar de la pista cuando la amiga que está a la derecha de Mary se me acerca al oído y me dice “Quédate y hagamos que los heterosexuales se mueran de la envidia”.

¡Palabras mágicas!, yo el marica del grupo, soy el rey de uno de los más afamados (y costosos) prostíbulos de Bogotá, y ahora tengo la oportunidad de causar malos sentimientos en aquellos compañeros que me arrastraron hasta allí y notables envidias en un conjunto de desconocidos que solo dios sabe si le están siendo infieles a sus mujeres. Mi actitud acaba de cambiar y me dejo seducir por ese aspecto malévolo del lado oscuro.

Paso las siguientes tres horas bailando en la pista con al menos dos parejas por turno, recibiendo besos y una prenda intima de quienes presentan el show, mientras que yo y las niñas del lugar intercambiamos miradas cómplices de venganza revuelta con malicia. Estamos disfrutando la noche.

Salimos mis decepcionados compañeros y yo del lugar cerca de las 2 de la mañana, escucho rumores entre ellos: “¿No dice que es gay?” y yo rio para mis adentros, giro y pregunto “¿Cuando volvemos?” y disfruto de las excusas sobre la mala ubicación y lo costoso del lugar, que como van a engañar a sus parejas, que estuvo bien una vez pero que no se nos vuelva costumbre.
Estoy seguro que no volveré, que no me volverán a invitar, que mi fama de puta de vereda ahora se extiende al plano heterosexual, pero sobre todo estoy seguro que la próxima rumba que tenga será en un bar gay y rodeado de personas con mis mismos gustos y sin mis compañeros de oficina.

Definitivamente los heterosexuales son muy raros, ¿Olvide mencionar que la famosa piscina de “La Piscina” solo tiene 15 centímetros de profundidad?

Fragmentos

Lo logre!! Lo logre!!! Más de 200 fans en Facebook, mi meta son 250, esa es mi próxima meta, estamos muy cerca, definitivamente la diferencia entre un sueño y un objetivo es la planificación. Por otor lado no olviden los que quieran seguirme en Twitter allá mi Nick es Joeycinho, pero no me pregunten como quedo todo en lazado porque no lo entiendo bien.

Bueno les tengo una sorpresa, en febrero publicaré en una revista de talla internacional pero 100% colombiana, Franja Rosa va con toda.

Existen sugerencias para hacer un colectivo de publicaciones con respecto al fin de año, he recibido una invitación pero sería rico hacer algo masivo, vamos a ver si esta convocatoria me funciona las anteriores han sido desastrosas, ni siquiera me enteré del lector 30.000. y eso que el premio era un noche de rumba y placer jejeje.

A los comentarios del post anterior

Joker: Yo no siria que eres heterosexual sino homosexual reformado, cargas lo necesario.

Memo: Bueno este clima sabanero obliga a usar bloqueador solar, mas con una piel tan delicada como la mía (diva que es una), las tarjetas fruto del roce social laboral diario.

Pridamo: Mas que responder a que lubrico, ¿Cómo sabes tú que arde?

Ochentero: Huy olvide el spray bucal de caléndula, los botones pegados en la correa y un pequeñito costurero portátil, jeje me faltaron cosas para ponerle al post.

Ángel de ojos claros: Sabes después de todo el maletín no es tan grande, o empaco muy bien o quizás tiene un espacio en otra dimensión para que quepa todo jejeje.

Arjuna: Jejeje mi maletín es gay, muy gay pero según creo tu maletín es más bien un morral de campaña.

Monchis: No solo falta la pava, también la sandalia con la uña nacarada y las gafas negras de carey.

Stanley: Es cierto solo vengo a trabajar, pero a veces creo que sería más fácil irme de travesía por el amazonas.

@polox: La verdad exagere un poco , pero olvide decir que cargaba el portátil, y una revista para leer cuando viajo y mejor no sigo por que siguen apareciendo cosas entre la maleta.

Un maletin muy gay

Una cosa tengo en claro, Franja Rosa se basa en criticar y analizar estereotipos, sin embargo soy plenamente consciente que no existe un gay típico, hay unos muy machos y unos muy locas, unos muy altos y unos muy bajos, hay unos muy feos y hay unos divinos… en fin, a pesar de no estar de acuerdo con los estereotipos siempre trato de encontrar ciertos comportamientos comunes.

He notado que mi maletín de venir a trabajar posee proporciones descomunales comparado con el de mis compañeros, así que sin una representatividad estadística significativa concluí que a muchos de nosotros nos complace llenar nuestra maleta de maricaditas que no siempre necesitamos pero que preferimos estar preparados ante cualquier eventualidad..

De esta manera me puse a revisar mi maleta para verificar que cosas contenía y al parecer la conclusión es aplicable en mí mismo, esto fue lo que encontré:

• Un terrible de enredo de cables de mi teléfono celular, está el accesorio de manos libres, el cargador, el cable de datos y el conector para el televisor, a veces uso el manos libres pero me da pereza sacarlo porque me toca ponerme a desenredar.


• Varios Cd´s de música, hay al menos uno original, uno que es copia casera de un original y uno que es pirata, de los Cd´s que cargo hay al menos uno que jamás he escuchado, sin embargo siempre se me olvida sacarlos de la maleta.


• Mi agenda de trabajo diario, y una libreta de apuntes en la que he rayado solamente dos hojas, y una de ellas tiene un número de celular sin nombre. En la agenda hay un montón de papelitos con recados, apuntes sueltos y uno que otro número de teléfono.


• Al menos cuatro condones que me han entregado por la calle en las campañas de prevención de enfermedades de transmisión sexual y que nunca he utilizado. (Obviamente no cargaría condones usados en la maleta jejej).


• Por lo menos dos manuales de uso y referencia, uno de mi celular y otro de mi reloj, pero de tanto colocarles cosas encima, al primero se le han caído varias páginas y el segundo esta todo arrugado.


• Dos memorias USB, una es muy bonita pero casi no tiene capacidad así que ya casi no la uso, se supone que tiene algún dato importante que me impide guardarla en casa con el resto de chucherías tecnológicas que adquieren obsolescencia en meses, la otra es mi memoria USB nueva solo que esta tan llena de archivos que ya casi no la puedo usar.


• Un llavero viejo, que seguramente alguien me regalo porque siento mucho pesar de deshacerme de él siempre está al fondo de la maleta y se enreda con cualquier prenda que guardo ocasionalmente.


• Bastantes bolsas plásticas que seguramente quedan de cosas que haya cargado con anterioridad y que podrían resultar útiles en algún momento, de hecho lo han resultado útiles para mareos de niños en buses urbanos, robos de frutas en antejardines de casas vecinas y captura de insectos de colores y formas asombrosas.


• Unos audífonos convencionales para conectarle a mi PC cuando en mi oficina hay demasiado ruido, de esa manera puedo concentrarme de vez en cuando, también sirve como herramienta para mostrarle a mis compañeros de trabajo que no me importa que ellos existan.


• Vaselina especial para los labios, con esencia de aromas frutales para cuando se me parten los labios por el frio o por el sol, eso si no soy vanidoso, pero cubrirme los labios con algún tipo de esencia que los proteja no atenta para nada mi masculinidad (al menos eso creemos todos los hombres que usamos vaselina, chapstick o brillo labial).


• En las campañas realizadas para prevención de la Gripa AH1N1 termine con una botellita de de alcohol glicerinado, útil para lavarse las manos sin enjuague, casi nunca lo uso pero he descubierto sus beneficios como lubricante…. jejejeje


• Una botella de agua, que debería andar entre las bolsitas plásticas pero que resulta siendo una bendición cuando después de largas jornadas bajo el sol llega uno a la oficina y se le ha olvidado comprar algo de tomar, también es útil para lograr un peinado chic de corta duración o limpiar manchas en el vestido o la corbata.


• Un cepillo de dientes en un estuche de plástico duro que por alguna razón me recuerda a un Dildo, es de las pocas cosas que uso con frecuencia, pero siempre termino guardándolo en cualquier bolsillo así que casi debo desocupar la maleta cada vez que me lavo los dientes


• Un pequeñito frasco de colonia de muestra que me regalo una amiga que trabaja en ventas por catalogo, y que conservo para estar listo en esas deliciosas ocasiones en las que la primera impresión es la que cuenta. Está sin destapar, ya en otra ocasión me había regalado una muestra parecida, se rompió en la maleta y esta quedó oliendo a colonia durante semanas.


• Mi hermosa cartuchera de cuero con una mola Tayrona hecha a mano, dentro, tres bolígrafos, uno muy fino que regalaron una navidad pero que no he vuelto a usar porque se le acabo la tinta y se me olvida comprar un repuesto, el otro, un portaminas metálico que uso de vez en cuando, y un esfero ordinario que me dieron en la oficina, con el cabezal mordido (No fui yo sino alguien a quien se lo preste) pero es el único que sirve.


• Monedas, de diferentes denominaciones, aparecen por los rincones o entre papeles, todo el dinero juntado no alcanza para pagar un pasaje de bus urbano.


• Manillas, hay una arcoíris que uso de vez en cuando, una de fibra de marihuana que se rompió y toca mandarla a arreglar y una que me encanta pero no la uso siempre porque no quiero parecer exagerado.


• Un papel muy doblado que sirve de backup a la agenda del celular, aunque los primeros teléfonos están ordenados, los últimos están escritos en muchas caligrafías y con muchas tintas de diferentes colores.


• Un pequeño tarro de crema para protección solar que uso con frecuencia, para evitar quemarme la cara en días soleados cuando estoy en la calle, en el fondo de ese bolsillo hay una mancha de las veces que se ha quedado el frasco a medio cerrar y se ha vaciado su contenido.


• Unas gafas oscuras, que no solo son útiles en los días luminosos, sino también para ocultar ojos cansados, mirar de reojo tipos buenos en la calle y a veces dármelas de ejecutivo importante.


• Pañuelos desechables para la congestión nasal, corregir accidentes ocasionados con comida, solventar una que otra urgencia y limpiar los zapatos tras cruzar una calle embarrada.


• Una Guía gay de la ciudad, que seguramente fue a parar a mis bolsillos y de ahí a mi maleta, en más de una ocasión la han visto mis compañeros de trabajo al buscar algo en la maleta. Nunca preguntan al respecto pero estoy seguro que comentan a mis espaldas, eso me encanta.


• Una cajetilla de cigarrillos con dos cigarrillos sueltos adentro y un encendedor, fruto de alguna rumba que quedaron por ahí rezagados y que ya están amargos y partidos por no usarlos. Cabe decir que antes de que algún lector se asombre, solo soy fumador social cuando estoy de rumba, sin embargo compro paquetes de cigarrillos cuando alguien fuma conmigo.


• Un par de marcadores de tablero que con seguridad termine guardándome en alguna presentación que realice, ahora cada que los veo me siento culpable pero los sigo usando.


• Un libro de diseño de sistemas de información que se me de memoria pero que utilizo de referencia, cuando alguien no cree en mi capacidad profesional.


• Tarjetas de clientes y proveedores de la empresa regadas por todas partes, hay una tarjeta de un lugar llamado “La mansión de la barbie”, estoy seguro que no tiene nada que ver con mi entorno laboral y menos con una juguetería.


• Un par de mentas de restaurante y un palito de colombina sin colombina, importante no arrojar basura al suelo. Una envoltura de chocolatina que me regalo mi bebe cuando apenas nos estábamos conociendo.


• Un llavero con las llaves de mi casa, de mi oficina, una llave que no sé de donde es y una simcard dañada.


• Un porta escarapelas que con seguridad me entregaron con el carnet de la oficina y que jamás uso para tal fin.


• Y muchas, muchas fotocopias con este listado para cuando alguien me pregunte: ¿Y qué tanto carga en esa maleta?

Consideran el hecho de cargar demasiadas cosas, ¿Como un aspecto típico en los gays?

Fragmentos

Que tal, mi maleta parece la bolsa del gato Félix o la barriga del gato cósmico mejor conocido como Doraemon, pero bueno forma parte de mi identidad, y prefiero tener siempre a mano las cosas que necesito a pedirlas prestadas, pese a las críticas de los que nunca están preparados para nada.

Ya supere los 170 fans en Facebook y progresando, ahora espero estar en Twitter también y que cuando publique aquí, inmediatamente se replique en estas páginas, para quienes tienen cuenta en Twitter y deseen seguirme, allá aparezco como ‘Joeycinho’.

Sigo publicando en Conxión magazine, la encuentran en los principales bares de la ciudad, en el mes de octubre hable sobre personajes gays en los videojuegos y la forma de seleccionar el condón adecuado. Franja rosa va con toda.

Un saludo a mi bebe, no sabe cuánto me alegra que seas tan especial conmigo.

A los comentarios del post anterior

A los seguidores que retornan: bienvenidos, este nunca dejara de ser un espacio que da la bienvenida a la participación, aunque me conformo con poder robarles de vez en cuando una sonrisa.

Ángel de ojos claros: jejej, por lo que puedo apreciar tu estas del lado de la luz, pero hay muchos que conocemos y valoramos el brillo porque hemos estado en la oscuridad, yo prefiero ser seductoramente oscuro, pero entre gustos no hay disgustos.

Joker: Yo adoro las nuevas experiencias. No niego que a veces me atrae la idea de restringir un sentido y potenciar los otros la vista nos vuelve dependientes. Pero por ejemplo ¿Concibes sexo sin tacto? Podría ser fascinante.

Milo: Me recuerdas una frase que decía un amigo en otra época: “Borracho que no la caga pierde su plata”, gracias por la explicación no comprendí el significado del comentario en la primera lectura.

Potter: Me gusta que hayas logrado ver la belleza oculta de un post que solo uso un marco para hablar la soledad, de paso para desnudar nuestras conciencias ante una realidad que no podemos negar.

Pridamo: Bueno como experiencia, excelente espacio para desfogar pasiones estamos de acuerdo, pero una cosa es concluyente, en un cuarto oscuro no solo convergen cuerpos, también llegan pensamientos y prejuicios, es increíble y deslumbrante la recursividad humana. Nuca deja

Stanley: Bienvenido de regreso, jejeje, la promiscuidad está mal vista desde la escala de valores de cada ser, yo no la juzgo, al contrario la he vivido cuando se debe vivir, pero creo que el hecho de opinar a este post es no mirar los toros de la barrera, gracias por tu aporte.

Cuarto Oscuro

Un cuarto oscuro es el microcosmos claustrofóbico perfecto para diseccionar y analizar la soledad del hombre homosexual.

Daniel tiene 19 años su recién adquirida mayoría de edad no le había dado el coraje suficiente para entrar en alguno de los 'antros' donde un cuarto oscuro le espera con cientos de deseos carnales transformados en realidades, pero aun así siente el profundo deseo de traspasar los límites de la moral y satisfacer esa ansiedad y curiosidad que lo motiva a pensar en el sexo mas allá de lo permitido.

Hugo tiene 55 años, aunque nadie conoce públicamente su verdadera orientación sexual, desfoga todo sus deseos secretos en el único lugar donde él considera que no va a ser despreciado por su edad y su apariencia, ya que la penumbra favorece el contacto, reduciendo las desventajas que le brindo la naturaleza. Y muy en el fondo debe admitir que no conoce otro lugar para encontrar a alguien que realmente cambie su vida.

Miguel se siente obsesionado con poseer más y más. Su adicción al sexo lo ha llevado a extremos que él jamás se hubiera imaginado, comenzó con pornografía, sexo telefónico y cibernético, ha entrado al plano real y se siente realizado a pesar de reconocer que se está hundiendo en la espiral descendiente de las pasiones humanas.

Sergio ha asumido la vida con una madurez demasiado elevada para su edad; su deseo de libertad y autocontrol lo ha llevado a probarse a sí mismo que es capaz de transgredir las fronteras de su propia sexualidad y reconoce que la experiencia en un cuarto oscuro es algo que se debe vivir antes de juzgar.

Raúl se encuentra desconcertado y durante varias ocasiones se pregunta que hace allí, no puede borrar de su memoria los recuerdos de la traición reciente y ha descubierto que su mecanismo de venganza no es tan placentero como su dolor le llevo a creer

Ahora todos encerrados empiezan a utilizar algunos de los códigos de la seducción homosexual.

Rápidamente Hugo se acerca a Raúl, sus manos se desplazan rápido sobre la piel de Raúl en busca de su sexo, pero son toscas y muy poco sensuales, avanzan con prisa y sin recato, Raúl trata de acoplarse pero la sensación de esas manos ásperas y arrugadas no le recuerda para nada las manos de aquel que todavía ama. Aunque lo intenta separa rápido las manos de Hugo y de sus brusco ademanes se dirige al otro lado del cuarto lejos de Hugo.

Sergio en tanto se ha acercado por detrás de Hugo sin percatarse que este estaba tocando a Raúl, Hugo sin más recato se acerca a Sergio avanzando hacia atrás y expone su trasero como claro símbolo que desea ser penetrado en el acto, Hugo trata de avanzar precipitadamente pero Sergio es mas tranquilo y se esta tomando su tiempo.

Raúl encuentra a Miguel en el fondo de la habitación quien sin pensarlo le manda la mano al trasero con lo cual Raúl huye a un espacio vacío, tratando de alejarse de los maniacos que allí acechan, pero ni el mismo se explica porque no huye de ese espacio.

Sergio avanza en su exploración de Hugo cuando encuentra una mano suave tocándole, es Daniel quien a tientas trata torpemente de integrarse a la actividad, la tención de Sergio se desplaza de Hugo a Daniel al encontrar un cuerpo más joven que palpar.

Lentamente y en un juego de caricias Sergio se presenta Daniel pero este se presenta con un nombre falso, poco a poco sus cuerpos se acercan pero finalmente sus labios se encuentran, la sensación para Sergio es gloriosa, pero para Daniel no es cómoda, siente que ese hombre que está a su alrededor podría pensar más en amor que en sexo y esa idea no lo convence.

Hugo avanza hacia donde estaba Raúl y se encuentra con Miguel, los movimientos bruscos y rápidos satisfacen el morbo de ambos, en medio de dos o tres movimientos, uno sodomiza y el otro aunque dolorosamente se deja ser sodomizado creyendo que el placer está al borde del camino del dolor, en el fondo se escuchan los profundos gemidos de Hugo tratando de mitigar su dolor.

Raúl contempla la escena pasmado y aunque en el fondo disfruta con lo que observa y escucha en la penumbra siente un profundo asco por lo que está pasando y decide huir de allí lo más rápido posible, pero sabe que debe atravesar el cuarto hasta la puerta de salida.

Los gemidos excitan a Daniel quien decide de forma intempestiva vincularse a la actividad placentera, sin una caricia, sin un beso, solo motivado por el instinto acercarse a Hugo y a Miguel y trata infructuosamente de buscar la atención física de los hombres que están ensimismados en un profundo acto sexual.

En su salida Raúl tropieza con Sergio, este se disculpa y le dice que no es un buen lugar para novatos, aunque Sergio hablaba de sí mismo, Raúl lo interpreta como un mensaje de apoyo perdido en ese mar de lujuria, se presenta y Sergio hace lo mismo, se sientan en un rincón e ignoran a los otros tres sujetos que se encuentran en frenesí, pocos minutos pasan para que Raúl le cuente a Sergio sobre su reciente traición, pocos minutos pasan para que Sergio motive a Raúl a salir del cuarto oscuro y compartir algo más cálido: un café.

Después de terminar con Hugo, Miguel trata de tomar a la fuerza a Daniel pero este se resiste porque esperaba que su primera experiencia en un cuarto oscuro fuera excitante y no un intento de violación, Hugo yace sentado a un lado y al parecer no tiene intenciones de ayudarle, Daniel se resiste y sale de allí rápidamente.

Miguel sale del establecimiento con la plena convicción de que solo puede tener sexo con tipos mayores ya que las loquitas están completamente perdidas, primero se ofrecen y luego se resisten.

Sergio y Raúl salen juntos, cada uno tiene la sensación que aun en el lugar más remoto e inhóspito se puede encontrar algo de amistad. Hablan animosamente y descubren que hay más cosas en el mundo aparte del sexo y el amor.

Daniel huye conmocionado, entiende que ese tipo de lugares están llenos de personas aprovechadas y de experiencias desagradables, con seguridad pasaran varios años antes de que vuelva a un lugar así.

Hugo sale solo, tarde y camina sombríamente hacia su casa, sabe que a pesar de todo, no era un cuarto oscuro el lugar para mitigar su cada vez más abrumante soledad.

Fragmentos

Que creyeron, que era un post de sexo, pues no trate de mirar las conciencias y los resultados de una situación ficticia, recuerdo el caso de la primera vez que fui a un sauna solo y nadie me volteó a mirar, a pesar de lo promiscuo de sitio sentí un profundo vacio a causa del rechazo. Hoy los comentarios están orientados a saber cómo ha sido su experiencia en un cuarto oscuro, el que diga que nunca lo ha pensado peca mas de mentiroso que de mojigato, las cosas por su nombre.

A los comentarios del post anterior

Son sus comentarios la voz de aliento para motivar la escritura, gracias por comentar, gracias por leerme, queridos lectores nunca me canso de repetirlo: este blog es lo que es pro que cientos posan sus ojos en las letras que mi cerebro destila.

Memo: El universo es tan grande que lo único que sabemos es que puede ser infinita la capacidad que tenemos de expandir nuestra comprensión del mismo.

Joker: Si afortunadamente le quite el matiz ladrilludo al tema, es más complejo de lo que parece ¿No?

Pridamo: Mucha gente ve el mundo en blanco y negro, debemos enseñarle que no todo está polarizado, ni siquiera avanza en una solo dirección.

Arjuna: ¡¡Claro!! No solo es conocer sino tolerar a las otras personas, este trabajo se orienta justamente a visibilizar y entender la diferencia y la diversidad.

Un ángel de ojos claros: Mi misterioso visitante, espero encuentres algo más interesante en estas letras con el pasar de tiempo.

Milo: jejeje, mi apreciado y admirado Milo, has develado uno de mis mas grandes misterios en la vida, ¿Que es lo que define a un gay?, pero en algo todos tenemos razón, para los gustos: los colores