Como nos cambia la vida, hace ya 10 años que empecé un blog
y bastante agua ha corrido bajo el puente, he cambiado de trabajo, de vivienda
varias veces, de marido muchas más y obviamente deje de ser ese joven lascivo y
lujurioso que solo pensaba en sexo para convertirme en un hombre maduro lascivo
y lujurioso que recoge los frutos de su gusto por los jóvenes lascivos y
lujuriosos que nunca han soñado con escribir un blog.
Este tiempo además han transformado la sociedad en especial
la digital donde la palabra escrita ha perdido su fuerza ante la gama de
servicios multimedia que ofrecen las redes sociales y muchos de mis amados
lectores migraron a la inmediatez del Facebook, la simplicidad del twitter y
los menos asiduos a la lectura a la chabacana y poco estética publicación de
Video Blogs.
Así que en días anteriores pregunte por mi regreso con
algunas respuestas positivas y una sobreviviente tasa de lecturabilidad de esta
amada y olvidada Franja Rosa.
Decidí por esta razón retornar a mis letras que es una de
las cosas de las que me siento orgulloso, con años de bagajes de aventuras y de
muchas cosas más y sobre las cuales estaré contando, veo que la dinámica gay capitalina mantiene estereotipos de las locas que frecuentan un mundo gay más liberado,
pero aun teñido con cuantas situaciones absurdas pueden suceder en el mundo.
Así que a partir del sábado 7 de enero espero estar publicando constantemente mis aventuras mientras capturo románticos lectores que enamorados de mis letras compartan esta pasión de escribir.
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