10 razones para permanecer en el closet

Debo admitir que esta es una de esas semanas en que mi espontaneidad al escribir se ve afectada por la turbulenta actividad laboral, de esta manera me veo obligado a recurrir a uno que otro apunte o página web que estimule mi creatividad y me permita tener algún resultado medianamente satisfactorio en esta maravillosa aventura de escribir para un blog.


No niego que conocer personas en este mundo gay es una labor que me ha resultado medianamente fácil, bien sea por que el maricometro mío funciona a la perfección si requerir de calibración en varios años, o bien porque la red de amigos que mantengo me permite cada día conocer más personas que beben agua de este lado del arroyo, sin embargo algunos individuos insisten sobre natura que su orientación sexual es aquella que la ética pública no discrimina en contravención con aquello que por natura les es dado.

Para explicar el párrafo anterior digamos que son esos individuos que a la hora de hablar de su homosexualidad se hacen los maricas, y juran públicamente y contra toda evidencia que les gustan las personas del sexo opuesto, comúnmente son conocidos como los enclosetados y siempre encuentran una justificación válida para ocultar su orientación. De esta manera desgastan incontables horas creando argumentativamente todo un universo de explicaciones para sobrellevar su doble vida: de Ken ante los amigotes y de Barbie ante los amiguitos.

Por eso hoy no pude hacer un rating de todas las razones que argumentan para justificar su enclosetamiento, ya que en lo personal todas me parecen igual de invalidas, y me limito a listar las 10 razones más comunes para ocultar su preferencia, hoy la expongo ante ustedes queridos lectores y lectoras, para que lean, juzguen y opinen.

1. Mi vida es privada y nadie tiene porque saberlo: Y en eso estamos de acuerdo, pero una cosa es que uno tiene el libre derecho a mantener la reserva sobre las acrobacias que es capaz de hacer en la cama (o cerca de ella) y otra muy diferente es construir todo un mundo donde existe una feliz y perfecta aunque evasiva pareja con tal de dar gusto a conocidos y familiares.

2. Soy un personaje público: Vamos al grano todos somos importantes para alguien, pero en la comunidad gay existe una manía a creernos gerentes de la empresa donde trabajamos de mensajeros, de esa manera el profesor de un colegio casi desconocido, ubicado en un municipio cercano a Bogota, evidentemente gay, no da su nombre verdadero por considerarse un personaje público del talante del ministro de educación, por favor, al Cesar lo que es del Cesar.

3. Esto es una etapa temporal de mi vida: Si como no, es durísimo convencer a los demás de que uno no es lo que es, pero la peor cosa que uno puede hacer es tratarse de convencerse a si mismo de una realidad que tajantemente se expele por todos y cada uno de los poros del cuerpo, nadie pidió nacer gay, nadie pidió nacer negro o blanco, ni gordo o flaco, así que es mejor admitirlo hay condiciones en la vida que no se pueden cambiar.

4. Podría perder mi trabajo: Para los interesados, la ley es clara respecto al tema de la discriminación laboral por concepto de orientación sexual, si va argumentar que en su trabajo no se pueden enterar es importante que sepa que la preferencia sexual no puede ser causal directa o indirecta de despido, y que una cosa es que en el trabajo sepan el sexo de lo que uno se come y otra muy diferente si el susodicho se quiere ir entaconada, con el vestidísimo rojo de noche, la peluca rubia, los aretes largos de brillantes y con un neceser y el secador de pelo para el trabajo. Pues hombre ahí si no es mucho lo que se puede hacer.

5. Mi familia no está lista para entenderlo: A mis queridos interlocutores, no conozco ninguna mujer embarazada que sueñe con que el fruto de sus entrañas le salga mariquita, lamentablemente ninguna familia está preparada, ya que es un proceso adaptativo, sería lamentable que se enteraran después de que uno murió cuando se falto el coraje para asumirlo delante de quienes más nos aman. Igual tarde o temprano todas las familias terminan por aceptarlo.

6. Me avergüenzo de la comunidad gay: Esta excusa es lo que uno llama típica carreta (por no decir pura mierda), propia de individuos que piensan que ellos son los únicos maricas no travestis del planeta y de algunos planetas cercanos, pero para su información la mayoría de los seres humanos no heterosexuales, asumen un rol propio de su identidad sexual y aunque no lo crean hay mas gays por metro cuadrado de lo que ellos mismos pueden imaginar.

7. Me haría muy vulnerable ante la sociedad: Ser vulnerable y ser gay son dos cosas muy diferentes, la condición de vulnerabilidad la produce el miedo al rechazo y a la discriminación, pero la visibilización es parte fundamental del reconocimiento, si permitimos que la sociedad se imagine que todos somos las locas alborotadas y con ínfulas de diva, no podemos reclamar que no nos miren como a bichos raros, yo por eso profeso: “Marica pero muy macho”.

8. Cuando tenga mis medios para no ser discriminado saldré del closet: Estos esperan tener la independencia suficiente para evitar que alguien los discrimine por su orientación sexual, sin embargo van complejizando su requerimiento con base en una insaciable necesidad de recursos económicos, académicos y sociales que hace inalcanzable ese momento crítico de liberarse ante el mundo y salir a decirles a todos que le encanta morder almohada, pocos como Ricky Martin tienen tal dicha.

9. Es que yo soy normal: Volviendo al punto 7, el ser gay no lo hace a uno anormal, ni travesti, no se niega que la parte más visible de la comunidad gay es aquella que las intenciones amarillistas de los medios hacen de nosotros, y es obvio que es mas noticia una drag queen o un pederasta depravado que un pobre individuo, feliz y fiel a su pareja y que todos los días va a su trabajo de corbata.

10. Eso no va conmigo: Para finalizar, en mis años de homosexual he descubierto tantas identidades y praxis dentro de la comunidad misma que nos podemos incluso clasificar en cientos de microgrupos específicos, entonces el decir que una actitud no va con uno es casi como definir un nuevo tipo de identidad dentro de la comunidad homosexual, al fin y al cabo lo único que nos diferencia del resto de los seres humanos es aquello que hacemos debajo de las cobijas (cuando el tiempo alcanza para llegar a la cama).

Al final del caso estas razones poseen un razonamiento lógico tan válido como el de esconder dos granos de trigo en dos carretas de paja, tardaríamos días buscándolos y cuando los encontramos vemos que no vale la pena tal esfuerzo.

Igual la verdad tarde o temprano sale a flote y a más de uno, no le ha tocado salir del closet sino que lo han empujado desde adentro. Yo por eso dije como el borracho: “A mi no me empujen que yo me caigo solo”

Fragmentos

Volviendo a publicar, les cuento que deje bastante tiempo mi historia de navidad ya que me encanto y recibí muy buena respuesta de ustedes, amen de contarles que en mi trabajo han dispuesto de aquello que en lejanas épocas solía llamar “Mi tiempo libre”, pero aun les falta mucho para que estos dedos dejen de deslizarse sobre el teclado exponiendo las ideas que perturban todos los días mi cerebro.

Feliz, feliz, feliz en mi nueva relación, aunque me ha distanciado de ustedes mis queridos lectores y lectoras, un pedacito de mi siempre viene a este lugar a probar que no me he olvidado de este pequeño rincón del mundo donde aprendí a soñar.

Gracias a todos aquellos que escriben, aunque algunas voces se silencian por lapsos, otras letras surgen en la blogaysfera, su luz ilumina muchos rostros y otros tantos corazones.

Volví a instalar la cajita de mansajes para dejar noticas pequeñas, esperemos que no se convierta en el tablero de mensajes para ansiosos de sexo que hace mas de un año me motivo a quitarla, los invito a dejar sus saludos en ella.

A los comentarios del post anterior

Un blog sin comentarios es un velero sin velas, es una brújula sin aguja, un mapa celeste en una noche nublada, en fin la idea es clara, gracias a todos aquellos que vienen a dejar a aquí su valiosa y ansiada opinión.

Arjuna: Mi inseparable Arjuna, creo que Margó es creación de nuestras eternas conversaciones, todos tenemos un poco de ella (o de él)

Memo: Disfruto que hayas degustado este post forma parte de la aventura de escribir el saber que lectores, colegas y amigos disfrutan de lo que uno hace.

Monchis: Bogotá es una ciudad de contrastes, un microcosmos saturado de grandes y crueles historias, un universo en si mismo que a cada esquina esconde un poco de magia para regalarnos.

Sandum: Debo admitir que el final de la historia fue el principio de mi escritura, pero reír y dejar un mensaje es de los pocos logros que pocas veces he obtenido con un post.

Ángel de ojos claros: Lo que paso es que José no alcanzo a solicitar el Roaming internacional y no le funciono el Blackberry en Colombia, todo ocurrió tan rápido!!!

La vejez: Muchas gracias por las felicitaciones y bienvenido a este espacio, la llegada de nuevos comentaristas me motiva mucho a escribir.

Juancho: Muchas gracias por tu visita, cuando la musa de la inspiración viene me siento dichoso de compartir sus frutos con todos ustedes.

Bueno y no siendo más por hoy muy pronto nos seguiremos encontrando en este espacio virtual.