Fetiches

Tras larga ausencia, retorno a mi amada Franja Rosa, durante este letargo de la escritura me fui de viaje a San Andrés, conseguí nuevo marido, y estuve en un combate a muerte con una mugrosa gripa que se creyó más fuerte que yo. Pero heme aquí en una sola pieza y dispuesto a continuar con esta maravillosa labor de escribir para un blog.


Tristemente su servidor paso inadvertido el cumpleaños de este espacio con un post que quedo a medio escribir, sin embargo aun celebro que mi amado blog haya alcanzado su cuarto año al aire.

Entrando en materia, y dejando la mojigatería a un lado hoy vengo a sentar mi voz de protesta con respecto a los fetiches, quiero decir, para que un fetiche incremente el nivel del morbo en la consumación del acto sexual, los dos o más miembros de la situación deben tener el mismo fetiche o uno de los dos se sentirá fuertemente excitado mientras que el otro se sentirá pomposamente ridículo.

¿Por qué protesto yo?, porque normalmente estoy del lado del pomposamente ridículo, so pena de perder la magia del momento a son de cumplir cabalmente la satisfacción de un fetiche por parte del compañero sexual del momento, por eso hoy traigo la lista de los fetiches más extraños que he escuchado en esta corta e inocente vida, lean y juzguen:

Caso 1: En pleno coqueteo preeliminar y con el simple objeto de romper el hielo, enciendo el televisor para que exista un ruido de fondo distinto a los quejidos y gemidos propios de la situación, con la mala suerte que en ese momento empieza una canción de fondo: “Barney es un dinosaurio que vive en nuestra mente y cuando se hace grande es realmente sorprendente”, en ese momento la contraparte evita que yo apague el televisor diciendo: “Deja ese programa que eso me excita”.

Caso 2: Los lubricantes en base de agua ayudan a disminuir el desgaste del preservativo, previniendo el riego de roturas y la propagación de enfermedades de transmisión sexual, sin embargo eso no significa de ninguna manera que el frasquito de 250 Cms3 de KY sirva como parte de los juegos eróticos hasta que no quede una sola gota en su interior ya que esta especialmente diseñado para lubricar partes intimas y no es pomada general para la cara y cuerpo.

Caso 3: Cuál sería la retorcida película que enseñó a los hombres de hoy en día que el uso de las malas palabras es lo que uno desea oír en el momento cumbre del acto, aunque lo he intentado con alma, vida y sombrero la verdad es que soy del tipo romántico y no considero que una erección sobreviva a la suma de madrazos, mariconazos, malparidadazos y muchos mas azos en la boca de aquel individuo con en el que anhelaba fundirme en un solo ser.

Caso 4: Una película porno puede lograr excitar los cuerpos de dos personas e imbuirlos dentro de aquel mar de deseo que lleva a la conjugación carnal (¿Excelente manera de definir un polvo no?), lamentablemente su servidor es de los que ante la monotonía de la historia y la ausencia de riqueza tanto en el argumento como en la austeridad de la producción (una vez vi una película que se llama seguridad aeroportuaria y no salía ni un solo avión), pronto encuentra este tipo de películas sosas y aburridoras antes de los primeros 10 minutos, por tanto no comprende como este fetiche pueda ser el motivo de excitación mas allá de la primera imagen televisada y menos de cómo se debe interrumpir el acto para ver qué pasa en la próxima escena (¡¡¡Como si no se supiera!!!).

Caso 5: Hablando de películas, aquellos con una trayectoria corta en las lides carnales tratan de ocultar su maravillosa candidez tratando de imitar aquello que han visto a través de internet o a escondidas en el DVD de la sala mientras la familia duerme, por eso es común que traten de decir “Oh yeah, Oh god”, ya que estas películas no requieren mayor traducción, pero de ahí a tratar de imitar el salto del armario para demostrar su experiencia como catre, representa un peligro para la salud pública a riesgo de terminar de 3 a 6 meses con un yeso que alguien firme diciendo: “Eso le pasa por culión”.

Caso 6: Admito que no soy un tipo pudoroso, que entre natura y la alimentación santafereña basada principalmente en carbohidratos no me han brindado un cuerpo digno de aparecer en revista alguna (De pronto en National Geographic), pero definitivamente no encuentro placer representativo en saber que yo estoy en lo mío, mientras algunas personas me están observando o escuchando y además de eso emitiendo cuanto comentario de grueso calibre y baja educación pueden emitir, como si el hecho fuera más un espectáculo público que un evento privado. Aunque si pagaron por verme tirar…

Caso 7: De pelos, no soy precisamente del tipo velludo, y aunque comprendo que algunos hombres les encantan los pechos peludos para sentir que tienen un osito entre sus manos, definitivamente es insoportable aquel que todo el tiempo se la pasa quejándose de que la naturaleza no me doto con lo que él ansiaba encontrar, si en verdad es tan importante como para pensar que todo fue un fracaso debido a que yo no era extremadamente velludo, simplemente se debe buscar otro ya que esa obsesión extrema por el vello corporal es de las pocas cosas en las que no lo puedo complacer.

Caso 8: La mayoría de las personas nos hemos querido hacer un tatuaje en la vida, y admito que uno que otro se ve atractivo cuando resplandece sobre un pectoral bien formado o en una levantada nalga, pero de ahí a que crean que uno está en éxtasis por ver un tatuaje hecho con aguja casera y tinta de bolígrafo, escrito en una espantosa caligrafía y muy dudosa ortografía: “Shisley y Maikol Steven forever”, es pedir demasiado, mas si la obsesión por los tatuajes quiere convertirlos en los protagonistas de la consumación del acto.

Caso 9: Es claro que los juguetes sexuales forman parte de los elementos que incentivan el desarrollo de la acción intima, esa fue la labor para la que fueron diseñados, pero de ahí pensar que todos los elementos tangibles tales como gajos de cebolla larga, pinzas cortafríos, destornilladores punta de estrella, perillas de puerta descolgados, y velones aromatizados de tres mechas forman parte de este selecto conjunto de objetos es como asumir que se puede descorchar una botella de vino con un vibrador.

Caso 10: De las primeras imágenes homoeroticas de las que tuve conocimiento fue de aquellas ilustraciones de Tom de Finlandia (Tom of Finland), donde fornidos caballeros vestían ajustadas prendas de cuero donde fuera posible destacar todos los atributos de su portentosa masculinidad, es lógico pensar que debido a esto más de una loca que haya intimado con su servidor haya considerado el cuero un fetiche, sin embargo las finanzas de quien les escribe no tienen el alcance suficiente para comprar cachucha de cuero negra, pantalones ajustados, chaqueta leather a juego y así quedar como roscón ochentero para complacer las fantasías con quienes he compartido el lecho, les tocara conformarse con los mocasines negros de venir a la oficina y la chaqueta deportiva que alguna vez compre.


Como ven en este mundo de locas, cada quien tiene alguna fijación y aunque algunas resultan un poco más exóticas que otras, lo único seguro es que no todos tenemos los mismos gustos, por esta razón cuando ustedes accedan a una conversación con un individuo cuya intención se encuentre más allá de la mera amistá, podrían preguntarle para romper el hielo: ¿Y tú que fetiches sexuales tienes?

Fragmentos

Me asombro con la magnitud de la polémica que ha desatado el matrimonio gay en el país del sagrado corazón, un atentado en Bogotá, la caída de un avión y la reconciliación entre Colombia y Venezuela han evitado que esto se convierta en una batalla entre defensores y opositores de esta ley.

Mi amigo el Joker ha regresado mas bronceado de lo que esperaba, feliz y dichoso, esperemos que en venganza de su bronceado no seamos muchos los quemados en los premios Joker, notaran que lo menciono con cierta frecuencia pero admiro la labor que este colega realiza en reconocimiento de aquellos que nos sentamos de cuando en vez a plasmar en letras mucho de lo que pensamos.

He recibido algunos mensajes de personas que desean contactarse conmigo para conocer un poco más al Joey detrás de Franja Rosa, para eso pueden enviar sus mensajes privados con su correo de contacto a joey.leon@hotmail.com, estaré presto a responder sus mensajes.

A los comentarios del post anterior

Gracias a todos por sus comentarios y esperemos que esta próxima marcha sea mucho mejor, a Santiago por su aporte y su punto de vista, a sexar por su interés y a Stanley por su retorno. Por supuesto que no me olvido de mis queridos y comunes comentaristas gracias al dulce Ángel de Ojos Claros, a mi gran amigo y colega bloguer el Joker, a mi inseparable Arjuna, al enigmático Akira, y al racional Jhon.

Para todos un gran abrazo.