Que día de la madre, día del amor y la amistad, día de la familia,
día del agua, del árbol, del pollo a la broaster, definitivamente existen más días
al año para conmemorar o celebrar que los días que tiene el año, ya casi cualquier
evento es motivo para recordar cada 365 días.
Yo mismo cumplo años 2 días después del día de la tierra, un
día después del día del idioma y si mi cumpleaños cae un viernes coincide con
el día de la secretaria y una semana antes que el dia del trabajo.
En medio de cada una de estas celebraciones me llama sobre
manera la misma forma de conmemorar dichos días, así por ejemplo en Bogotá el
día del orgullo gay que consistía en un carnaval diseñado para celebrar lo
orgullosos que nos sentimos de ser maricas, se convirtió en una especie de
marcha conceptual diseñada para reclamarle al gobierno la ausencia de
un trato privilegiado, y que según el político de turno es para darnos puente donde
no hay rio o mejor dicho silicona donde no hay tetas.
Sin embargo me llamo la atención cuando oí hablar del día
del espíritu, a decir verdad escuche los nombres de Tyler Clementi, Seth Walsh,
Justin Aaberg , Raymond Chase, Asher Brown y Billy Lucas, seis jóvenes homosexuales
estadounidenses que durante el año 2010 decidieron quitarse la vida.
Ninguno de ellos tenía problemas de alcohol o drogas, todos
provenientes de buenas familias y con futuros promisorios, ¿Entonces que causo
que estos jóvenes se suicidaran?, nada más ni nada menos que el hecho de ser
maltratados por sus propios compañeros de escuela quienes los discriminaban y
violentaban solo por su orientación sexual.
Las voces de estos seis jóvenes no volverá a ser escuchada,
todos sus sueños fueron cortados de raíz, de ellos solo quedan sus dolientes
familias con un enorme vacio que durara para siempre, sus familias son árboles cuyas hojas fueron cortadas solo por que otras personas no
fueron capaces de aceptar la diferencia.
Estas seis muertes son solo la punta del iceberg del inmenso
total de muertes que la discriminación y la homofobia ha dejado esparcidas por
el mundo, pero aunque sus cuerpos fueron devueltos al mundo sus espíritus
permanecen aun en el mundo alentando la lucha contra la homofobia, así la
adolescente Brittany McMillan decidió
tomar una imagen tan universal como lo es nuestra bandera arcoíris y
emblematizar el color morado que representa el espíritu como el símbolo de la lucha contra la discriminación por la orientación sexual.
De esta manera el 20 de octubre de 2010 se conmemoro el
primer "Día del espíritu" donde muchas personas, homosexuales y heterosexuales, vistieron prendas de color morado
manifestando que no toleraran la violencia contra las personas debido a su
orientación sexual, un suicidio por acoso es la forma más brutal y menos
visible de un crimen de odio, mientras las victimas se quitan la vida para dejar de ser torturados, los victimarios
siguen sus vidas “Normales” creyendo que el mundo es cuadriculado y que todo
aquello que no encaje con su perspectiva de vida debe desaparecer.
Claro que usar prendas moradas no acaba con la homofobia, pero
este año que se conmemoro por tercera vez el día del espíritu y que no faltaron
las reacciones homofóbicas, se hace notar que la historia se sigue construyendo
día a día y que quizás el morado podría convertirse en el símbolo de la lucha
contra los estigmas que la sociedad ha implantado como si fueran poseedores
absolutos sobre lo que es bueno y lo que es malo, solo de una cosa puedo estar
seguro, ser homosexual no es malo, pero acosar a alguien hasta hacerlo quitarse
su propia vida, si lo es.
Lamento no haber podido publicar este texto antes del 20 de
octubre de 2012 sin embargo al menos tuve la oportunidad de usar una camisa
morada y de compartir hoy con ustedes el conocimiento que obtuve sobre el día
del espíritu, sin necesidad de marchas ni protestas para que el próximo 20 de
octubre seamos muchos más los que vestimos de morado en señal de intolerancia
contra la discriminación, quizas ya empezamos a ser parte de esta historia.
1 comentario:
Es un día para reflexionar... Yo la verdad no sabía, pero concuerdo contigo en que el suicidio por causa del matoneo en los colegios especialemente por la orientación sexual es una forma terrible de violencia.
Yo la viví en carne propia... Aunque nunca en un grado tan extremo que me llevara a pensar en esa posibilidad.
Saludos,
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